La Costa Brava se extiende a lo largo de 180 kilómetros en el litoral norte de Cataluña. Sus playas se caracterizan por estar cubiertas de guijarros y por la belleza que le confieren las montañas cuyos acantilados desembocan directamente en el mar. El encanto de la Costa Brava convierte a muchos de los turistas que la visitan por primera vez en visitantes asiduos.

Más de trescientos días de sol a lo largo del año y unas temperaturas muy agradables tanto en invierno como en verano hacen de esta región el lugar ideal para adquirir una segunda vivienda. Los pintorescos pueblos de la región resultan irresistibles para todo aquel que desee instalarse en un lugar tranquilo y acogedor de forma temporal o definitiva. 

La compra de una villa en la Costa Brava es una excelente oportunidad para instalarse en una de las zonas más privilegiadas de Europa. Es asimismo una inversión que puede amortizarse mediante el alquiler durante cualquier época del año, ya que la demanda de alojamiento en la zona es muy elevada tanto en invierno como en verano.Nuestro objetivo es ofrecer a nuestros clientes los inmuebles mejor ubicados, centrándonos preferentemente en aquellos que se encuentran más próximos a la costa.Una ventaja adicional asociada a las viviendas cuyo coste supere los 500.000 € es que facilitan la adquisición del permiso de residencia en España.